Decidme para qué queremos los coches, para qué queremos las casas.
Decidme que es verdad que necesitamos protección.
Convencedme de que no somos una plaga. Convencedme de que existe Dios.
Repetidme eso del amor. Que os queréis unos a otros, he oído ¿no?
Decidme para qué exactamente,
para qué existimos.
Perdonadme estas incoherencias, estos interrogantes indiferentes; disculpad que suelte tantas paparruchas indecentes. Sólo me gustaría saber lo que parecéis saber todos y así poder esbozar la misma sonrisa de imbécil.
1 comentarios:
¿De qué película es esa escena? Le va perfecta al texto
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